El escenario cobrará vida con el destello de trajes brillantes de lentejuelas, evocando la elegancia clásica de los peinados al estilo de Gardel, mientras que los ganchos y firuletes agregarán un toque de autenticidad y nostalgia. Cada detalle cuidadosamente elegido será como una melodía visual que resonará en lo más profundo de los espectadores, creando una conexión mágica entre el escenario y el público.